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Placeres compartidos: Lucía Bosé

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Abrir las puertas de lo desconocido con Lucía Bosé es cruzar hacia nuevas orillas del conocimiento. Antes de conocerla una iniciática familiaridad ya intuía que tejeríamos caminos creativos. Más allá de su legendaria belleza y del espíritu acogedor late la capacidad de estimular a pensadores, artistas y a todo lo que devuelve candil a la sabiduría. Su mirada comprensiva -espejo de alma cincelada por toboganes del destino- me saludó nombrándome como león de sombra/hombre-nube. Siempre guardaré en mis cuadernos los viajes en coche Madrid-Sevilla-Córdoba-Cáceres a inaugurar exposiciones de Otero Besteiro, Domingo Vega o Ginés Liébana o para ver interpretar a Paola Dominguín mi texto-monólogo Será leyenda luego. Noches de conversación efervescente en Somosaguas, enriquecidas por la presencia de Luis Racionero, Miguel Bosé, Jesús Tablate. Punto y aparte el encuentro-talismán en mi carrera cuando Liébana, Lucía y Juan Pardo me dieron en Apolonio Morales (Madrid) el espaldarazo en la ruta del buscador, balcones a la lontananza-quimera. Noviembre del 87 que empezó a cambiarlo todo, reconocerme en magia-misterio, con pensamiento-ritmo. Y burla-burlando generar nuestra Empresa Invisible. Con mi capa de hombre-nube, entre cristalitos machacados, gracias al bautizo tintineante y rumboso de Lucía, decidí adentrarme en la exploración de las incógnitas emocionales en un viaje con asombrosos descubrimientos.

En Somosaguas crecían poemas y canciones de la actriz italiana y también la familia del arte en sus conexiones naturales. Su casa siempre fue hotel para el pensamiento conciliador, diverso y divertido, mesa y mantel cuando la palabra necesitaba cocinarse a fuego lento. Así se visualizó en la exposición Ollas de antes/Ollas de ahora donde nos embarcamos Ginés, los Bosé, Tino Casal, Manolito de la Fuente y todos los duendes de la frivolidad insumisa. Merienda en el Ritz y paseos por el Madrid universal. Lucía interpretó -todo corazón- mi texto Tu ángel te guarda en Galería Estampa al son de mi “Cuaderno de Habaneras”. Ángeles activos, sí, sin miedo a perder y renacer, como proclamamos en Córdoba. En paralelo, Lucía creaba su Museo de ángeles, aventura ilustrada por la aportación de la elite pictórica. Con Rosa Perales, coordinó el libro colectivo La empresa invisible, donde comparto autoría con Miguel Bosé, Leopoldo Alas, Luis Racionero,Francisco Nieva, Nacho Cano, Pablo García Baena. Buscar alegría donde campaba a sus anchas la apatía y el sonajero depresivo.

Tiene Lucía capacidad de comprensión, generosidad y ánimo luchador. Es un vitamínico andante para la timidez -vestida de dudas- que lucimos a menudo quienes nos asomamos a espacios desconocidos. Juega por las bandas, abriendo espacios. Las horas a su compás, con Boris Izaguirre, Paola, Vittorio y Luchino, Enrique Llovet, Catena. Coronado, fueron delicia para mi alma nómada. Era lo más pop en las épocas de Mundo Joven cuando Zulueta jugaba al un-dos-tres-escondite inglés y amparó los inicios de Juan Pardo o Camilo Sesto. Picasso, Otero Besteiro, Liébana, Aute, Serrat, Raphael, Natalia Figueroa, Racionero, recibieron el impulso motivador de la brava Lucía, tenaz emprendedora pero también niña y de exquisita ternura cuando se trata de deletrear los lenguajes del corazón.

Belleza dinámica que siempre promueve universos emocionales porque no se queda en la estatua de sal de un pasado estelar imposible de retener. Lucía ha cedido márgenes para que aflore lo bello de quien el escaparate no clasifica como modelo. Aunque ha lidiado con heraldos de lo siniestro, su apuesta por la vida sentida con humor. amor-pasión siempre ha encendido luces en la oscuridad. En Bodegas Campos (Córdoba) cuando presentamos Penumbrales de la Romeraca de Liébana con Vicente Núñez, firmamos en las barricas con corazón de roble intemporal mensajes al Cosmos esperando la respuesta del viento, la que llega con la divina compañía de la libertad; voz de los humildes sin miedo a debatir con los avatares del destino. Con solera de alma bohemia y la mirada enamorada de la vida en plenitud.

 

Escritor, periodista , compositor, guionista, autor multimedia. Director de audiovisuales para grandes muestras y creador de spots publicitarios, desarrolla una intensa actividad en conferencias, talleres y encuentros sobre lenguajes emocionales y comunicación.

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